La primera exposición mediática de alguien corriendo descalzo fue en 1960, cuando el atleta etíope Abede Bikila ganó la maratón de los JJOO de ese año en Roma. Pero realmente la primera semilla de la revolución "barefoot" fué un artículo realizado, en 2004, por un antropólogo y un biólogo de la Universidad de Utah, en el que concluyeron entre otras cosas, que los seres humanos han desarrollado una capacidad superior para correr grandes distancias en condiciones difíciles.
También me gustaría destacar el articulo de la Universidad de Harvard en los que explican que el 30% de los corredores habituales se lesionan cada año y la fuente de esos problemas casi siempre se encuentran en los pies y zona baja de la pierna. El 75% de los corredores que usan calzado tradicional aterrizan con el talón al correr, este apoyo genera un impacto súbito y de gran fuerza sobre el sistema músculo esquelético, y el apoyo del antepié (que usamos corriendo descalzos) decelera la velocidad de la fuerza reduciendo hasta 7 veces el impacto súbito.
Pero no todo son beneficios, al correr descalzos podemos cambiar la pisada o no. Si cambiamos la pisada y no lo hacemos de forma muy gradual se arriesgan a que las nuevas fuerzas y músculos implicados no se adapten bien y sea la propia transición la que genere la lesión. Y si no cambian la pisada, al no tener amortiguación y seguir apoyando el talón, el impacto será mucho mayor y las probabilidades de lesión aumentarán consideranblemente.
Desde mi experiencia hasta ahora no he tenido ningún problema, solo han sido beneficios, aunque solo lo he realizado en zonas blandas (cesped, arena) y durante tiempos reducidos, no más de 20 minutos, y para soltar piernas después de entrenamientos de series en la pista. Y creo que mientras no tengas acostumbrada la planta del pie, este tipo de rodajes debería ser el utilizado para hacer barefoot.
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